“Demos” = pueblo
“Krátos”= poder
La palabra democracia proviene de los antiguos griegos, los mismos que establecieron una forma directa de gobierno en la antigüedad. En esta, los hombres adultos participaban levantando la mano, ya sea si estaban a favor o en contra de las diferentes ideas expuestas por el gobierno.
En Atenas, considerada la ciudad de los sabios, muchos hombres respetados por la sociedad empezaron a sentir la necesidad de participar de las decisiones e ideales políticos, por lo que comenzaron a apoyarse en el pueblo. Fue así cómo inició el proceso, en el cual el pueblo interesándose cada vez más en exponer sus intereses, fue tomado poder hasta el punto de ejercer un voto, dando así a la vez, origen a la democracia.
En sus orígenes el propósito de la democracia fue mantener contento al pueblo, por lo tanto, el gobierno comenzó a hacer lo que el pueblo quería. También buscó estabilizar las propuestas, pues cayeron en cuenta de que la única manera de garantizar que una idea fuese la correcta, sería a través de la unanimidad.
La forma de votación en Atenas era muy sencilla, pues sólo se planteaban las propuestas, leyes o ideas, y los hombres alzaban la mano cada vez que estaban de acuerdo con una de estas. Sin embargo, con el paso de los años la democracia ha ido evolucionando hasta la actualidad. Los derechos del hombre y el crecimiento de las poblaciones, son dos factores que contribuyeron a que la democracia se vuelva universal, y la búsqueda de un manejo político y más dinámico, la ha vuelto más compleja y ha provocado varias subdivisiones de esta.
Sucesos históricos, no tan lejos de la actualidad, nos permiten ver cómo la democracia, que va de la mano con el capitalismo, enfrenta al comunismo y toma mayor popularidad en el mundo entero. Este es el caso de la Segunda Guerra Mundial, donde los Estados Unidos, triunfan sobre una Alemania comunista en manos de Hitler, determinando así, la caducidad de un sistema donde el pueblo no aportaba en la política.
En fin, la democracia ha atravesado increíbles pasos en la historia hasta alcanzar su forma actual; desde comienzos en la antigua Grecia, donde para opinar sólo se levantaba la mano, hasta la terrible Segunda Guerra Mundial, en la cual la democracia tumba a la imagen del comunismo y se impone mundialmente.
